MANOLO GARCÍA "Nunca el tiempo es Perdido"
Mayo 2001 Duración: 61'36''Producido por Manolo García© BMG Ariola
1. sin que sepas de mi (5:14) 2. suave, suave (3:56) 3. rosa de alejandría (4:34) 4. somos levedad (3:59) 5. como los hombres azules (4:49) 6. vendrán días (4:48) 7. mientras observo al afilador (6:15) 8. nunca el tiempo es perdido (4:26) 9. por respirar (4:42) 10. alegre como una mosca ante un pastel de bodas (4:54) 11. prendí la flor (3:58) 12. en los desiertos por habitar (3:09) 13. alegre como una mosca ante un pastel de bodas (0:38) 14. Un plan (5:08)
Sin que sepas de mí(Manolo García) Duración: 5'14''
No puedo obligarte a que me quieras.
Sabe Dios que no puedo dejar de quererte.
La espina del dolor rasga mi pecho.
Sé que no te alejará la niebla de los días.
No hay un solo motivo por el que quiera olvidarte.
Seré, sin molestarte, sin que sepas de mí,
gozne que hará girar la puerta de tu sueño.
Sé que no me olvidarás.
Sé que no te olvidaré en la niebla de los días.
Seré, sin que sepas de mí.
Seré lo que yo quiera ser.
El deseo en los besos que des.
Seré lo que tú quieras ser.
Seré. Sin que sepas de mí.
El guante que cubra tu mano,
la mano que arañe tu espalda,
alfanje a tu cuerpo ceñido,
seré en tus labios su fina curva.
A tu hoguera de pavesas llego y soy bien recibido.
Bebe y llénate la copa que te ofrezco siendo otro.
No te guardo rencor porque hayas abandonado.
Sé que no te alejarás. Sé que no te alejarás.
vives tras tu muralla.
Seré, sin que sepas de mí.
Seré lo que yo quiera ser.
El deseo en los besos que des.
Seré lo que tú quieras ser.
Seré. Sin que sepas de mí.
El guante que cubra tu mano,
la mano que arañe tu espalda,
alfanje a tu cuerpo ceñido,
seré en tus labios su fina curva.
Seré trino irisado de jade,
nazarí, palabra de poeta,
alfanje bruñido en siglos,
blanco de lirios. Aljibe y agua.
Suave, suave(Manolo García) Duración: 3'56''
Una encina.
Un sol que es un espejo.
Un viñedo.
El sabor de unas piedras de sal.
El musgo del espíritu dormido,
blanquearlo con cal.
Una siesta y el olvido.
Clavellinas.
Enero y su reflejo.
El viento de la vida.
Carmencita bajo aquel cerezo.
Nardos dibujado con tinta en tu ombligo.
El olvido sesteando a la brisa de un pino.
Suave, suave desciende la colina.
Verde, suave hasta llegar al mar.
Suave, dulce se va la vida mía,
detrás de Lucia mi vida se va.
Suave, suave desciende la colina.
Lentamente se apaga mi amor.
Suave, suave desciende la colina.
Lentamente se duerme la razón.
El tambor del trueno en la tormenta.
No hayan caminos donde deban haber selvas.
Vida silvestre que deslumbre en los barrancos.
Jarabe de rosas de aromáticas lenguas.
Clavellinas.
Febrero y sus promesas.
El cortejo de las fieras.
Verdes mariposas como hojas de enredadera.
Solos, ante campos dormidos.
Fuimos, somos y el olvido.
Suave, suave desciende la colina.
Verde, suave hasta llegar al mar.
Suave, dulce se va la vida mía,
detrás de Sofía mi vida se va.
Suave, suave desciende la colina.
Lentamente se apaga mi amor.
Suave, suave desciende la colina.
Lentamente se duerme la razón.
Suavemente la tarde se adormece
velas blancas del puerto partirán.
Rosa de Alejandría(Manolo García) Duración: 4'34''
Rosa de Alejandría, rosa amarilla.
Alejarme quiero. Adentrarme en el silencio.
Alejarme quiero
de esta vida que yo vivo sin convencimiento.
Y adentrarme en el tiempo de las luces,
barros vivos encendidos por la manos
del misterioso alfarero.
Alejarme quiero. Adentrarme en el silencio.
Caminar sereno. Abandonar esta senda.
Alejarme quiero.
Andar en los atrojes
con las golondrinas de azuladas plumas.
Convertirme en caja de medir fanegas,
arrobas, celemines; ser trigo en las eras,
nunca polvo en las aceras.
Rosa de Alejandría, rosa amarilla.
Hoy has de ser mi guía, la luz que brilla.
Faro de mediodía, rosa sencilla.
Rosa de Alejandría, rosa amarilla.
Con las flores de un campo encendido
como un San Francisco entre jarales vivos
de lagartos, vivo.
De quimeras me alimento,
con simplezas me contento.
Mozas de risueño gesto en calma me encuentran
como a un Góngora perfecto,
perviviendo lejos del bullicio,
con mi rosa amarilla, con mi rosa de los precipicios.
Alejarme quiero. Adentrarme en el silencio.
Alejarme quiero. Abandonar esta senda.
Alejarme quiero.
Rosa de Alejandría, rosa amarilla.
Hoy has de ser mi guía, rumbo entre islas.
Faro de mediodía, rosa sencilla.
Rosa de Alejandría, rosa amarilla.
Somos levedad(Manolo García) Duración: 4'59''
Cruzan nubes grises
por un cielo turbio y feroz.
Esta tarde espesa, acodado en este balcón,
fumo y me consumo,
enfrente el Arco Iris Club
Caminábamos y el calor de verano
empujaba nuestro asombro
contra las paredes llenas de grafitis.
Caminábamos y el fogón del verano
engullía nuestro asombro
por obstinarnos en lo imposible.
Como tú, camino por esta estrecha calle.
Como tú, necesito soles que giren para alumbrarme.
Que hagan brillar lo bueno que pueda haber en el alma.
Sonrío al viento porque en él
huelo el humo del incendio.
Porque se que la fe es creer
en algún dios aunque no existan.
O existir aunque ese dios
a veces no crea en ti.
En caminar, aunque hoy no brille tu estrella.
Como tú, camino por esta tierra que pronto será yerma.
Levedad. Somos levedad.
Levedad. Somos levedad.
Cruzan nubes grises,
trallazos que tapan tanta voz,
que beben mi tormento,
que me arrancan de este sopor.
Leo y me sosiego, abajo.
Abajo el Arco Iris Club.
Caminábamos y el calor de verano
empujaba nuestro asombro
contra las paredes llenas de graffitis.
Caminábamos y el fogón del verano
engullía nuestro asombro
por obstinarnos en lo imposible.
Nunca cesa la matraca de motores.
Noche y día pasan coches atronando
en su estela por la avenida abajo.
Abajo, paraguas de fantasmales luces.
Son los árboles grasientos de monóxido.
Y esa lluvia filtrada que no limpia la ciudad.
Abajo, en el portal, veteranos
de una vida de sinsabores
duermen asidos a la botella
como para no caerse cuesta abajo.
Cuesta abajo, caminábamos, aquel verano.
Levedad. Somos levedad.
Levedad. Somos levedad.
Levedad.
Con los hombres azules(Manolo García) Duración: 4'49''
Sobre mis párpados vela
el gallo de la madrugada,
sobre el péndulo que la vigilia mueve.
Tus rotundas palabras, tu cortante gesto
son el gélido viento que silba
por las rendijas de mi pensamiento.
Y es tan grande la tristeza que hoy siento...
Aléjate espejismo del amor eterno,
sólo eres literaria veleidad.
Ni al peregrino das posada
ni al sediento agua
ni al que ansía saber muestras la verdad.
Detesto el tiempo, la ansiedad lamento.
Descansar sólo quiero, junto al calor del fuego,
Me amarro al momento, y lo único que poseo,
con los hombres azules irme al azul desierto.
Es lo que hoy deseo, y a ti te deseo
que de cascabeles, pífanos y timbales
se alegre tu camino.
Que nunca te sea adverso el destino.
Que encuentres en tu vida
amigos diáfanos y entretenidos.
Sobre mis párpados velas,
frágil ave de la madrugada.
Eres péndulo que en la vigilia hiere.
Tus cortantes palabras, tu rotundo gesto
son el gélido viento que silba
por las rendijas de mi pensamiento.
Y es tan honda la nostalgia que hoy siento...
Aléjate espejismo del amor eterno,
sólo eres literaria veleidad.
Ni al peregrino das posada
ni al sediento agua
ni al que ansía saber muestras la verdad.
Somete el tiempo apagará el lamento
bajo un límpido cielo al calor del fuego.
Me acojo el momento y lo único que deseo
es con los hombres azules
irme al azul desierto.
Es lo que hoy deseo.
Y a ti te deseo que encuentres tu camino.
Es lo que hoy te deseo y lo que hoy te escribo.
Vendrán días(Manolo García) Duración: 4'48''
Vendrán días en que el peso que hoy te abruma se hará liviano.
Vendrán días en que ese peso ya no será carga sino bagaje.
Vendrán días, han de venir.
Porque un alma que alberga sentimientos viles no brilla
y un alma sin brillo es un tiempo marchito para quien lo soporta.
Déjame que escuche esa guitarra que me falta el aire,
que hoy necesito besar otros labios creyendo que beso tus labios.
Déjame perdido en negra noche que hoy el dolor duele,
que hoy necesito buscarte sin miedos, en otros rostros buscarte.
Llega el tiempo que en tu campo amado plantarás pensamientos.
Junto al pozo de tu huerta enjambres de madreselva.
Y esa calma, esa calma te ha de ayudar.
Porque un alma que mora en la sala de los pasos perdidos
es la furia vencida, cáscara vacía de un dolor exacto.
Déjame beber de ti en los labios de mujer extraña,
que hoy necesito el calor de unos brazos
que apaguen mi vana esperanza.
Déjame desnudo de recuerdos. No los necesito.
Que hoy necesito buscarte sin miedos, en otros rostros buscarte.
Dame un lenguaje sin palabras para abrigarme que tengo frio.
Dame besos y caricias olorosas y descalzas.
Dame un mundo sin palabras que yo respire porque me ahogo.
Dame besos y caricias sinceras o mercenarias.
Déjame que escuche esa guitarra que hoy me falta el aire,
que hoy necesito besar otros labios creyendo que beso tus labios.
Déjame perdido en la noche que hoy el dolor duele,
que hoy necesito buscarte sin miedos, en otros rostros buscarte.
Déjame que escuche esa guitarra que hoy me falta el aire.
Mientras observo al afilador(Manolo García) Duración: 6'15''
A veces imagino por un instante
que no te has ido y el tiempo se detiene.
A veces imagino por un instante,
mientras observo al afilador.
Mientras observo al afilador
que sin descansar pule lentamente
las líneas de mi mano, las líneas de mi frente.
Ha llegado el día
en que los atardeceres han de encontrarme
atento al arrullo de las palomas en los dinteles.
Me muevo por cunetas y por esteros.
Resbalo en las pendientes de arena gruesa,
por tierras solitarias, ayer fronteras.
Mientras observo al afilador.
Mientras observo al afilador
que barre la escalera que acaba en tu puerta
y canta quedamente con lluvia de aguanieve.
Ha llegado el día en que habrá que desprenderse
de las baratijas, ofertas de algún "Mes todo para el hogar"
y asilvestrarse.
Con mi locura conservo asombro.
Sobre los hombros la alegría
que hasta ayer mismo compartimos.
Tu recuerdo me conmueve
como al zagal nacido en estrechos valles
conmueve el concierto de las mareas.
A veces te veo por un instante.
A veces, siempre, te sueño
antes de desaparecer
tras los tenderetes de los aduares.
A través de los cercados
donde pastan caballos alados.
Donde estés, somos libres.
Ahora sé que somos libres.
Donde estés, te quiero libre
Donde estés, quiéreme libre.
Como en la fotografía, inmóvil soy.
Preso me tengo. Parado tras los cercados.
Donde soy prisionero sin alas con la Nación India.
Donde estés, somos libres.
Ahora sé que somos libres.
Donde estés, quiéreme libre
Donde estés, te quiero libre.
A veces imagino que no te has ido.
A veces imagino.
A veces imagino por un instante que no te has ido.
Y el tiempo se detiene. Y el tiempo se detiene.
Y el tiempo se detiene.
Nunca el tiempo es perdido(Manolo García) Duración: 4'26''
Cuando tú no estas las mañanas se tiñen de canciones tristes,
son como el leve perfume que por un instante te baña y te marca.
Cuando tú no estas las mañanas se tiñen de canciones tristes.
Rastro, huella de los pasos errantes,
del buscador de señales
nunca el tiempo es perdido
es sólo un recodo más en nuestra ilusión ávida de olvido
nunca el tiempo es perdido
nunca el tiempo es perdido
es sólo un recodo más en nuestra ilusión ávida de cariño
nunca el tiempo es perdido
nunca el tiempo es perdido
Cuando regresas las mañanas levantan el vuelo
quizá es el momento de la brisa suave
que acaricia con tu llegada hasta tu partida.
Si regresas las mañanas se visten de alegres canciones.
se disfrazan de sonrisas,
son el hálito justo que apaciguara el pulso.
Son la broma o la mano del destino.
Si tú regresas las mañanas se visten de alegres canciones.
Rastro, huella de mi búsqueda errante,
que sin ti no encuentro señales
nunca el tiempo es perdido
es sólo un recodo más en nuestra ilusión ávida de olvido
nunca el tiempo es perdido
nunca el tiempo es perdido
es sólo un recodo más en nuestra ilusión ávida de cariño
nunca el tiempo es perdido
nunca el tiempo es perdido
Por respirar(Manolo García) Duración: 4'42''
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por confiar, por respirar serena y saber esperar.
Renacerás. Será un regalo de tu propia fe.
Tu propia cuna la que has de mecer cantando en la alborada.
Renacerás. Si no te empeñas en querer sufrir.
Precioso tiempo tu vida ha de ser, preciosa perla rara.
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por confiar, por respirar serena y saber esperar.
Hay un cielo ahí afuera
con sus planetas visibles colgando.
Hay un mundo visible
como un decorado de feria.
Y una montaña de vidas
que con respirar ya se conformaría.
Y el toro negro de Osborne recortado sobre el horizonte
es una sombra negra.
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por respirar, por respirar serena y saber esperar.
Como se cruzan las carreteras
para después volver a separarse,
se cruzaron tu vida y la mía;
dardos hacia la diana de nuestra lotería.
¿Por qué se cruzan las vidas que se tocan
y luego vuelven a separarse?
Un filón de suertes que se mezclan.
Alquimia en el laboratorio Kosmos del doctor Noestamossolos.
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por confiar, por respirar serena y saber esperar.
Renacerás. si no te empeñas en querer sufrir.
Precioso tiempo tu vida ha de ser, preciosa perla rara.
Por respirar, por confiar de nuevo y volver a creer.
Por confiar, por respirar serena y saber esperar.
Alegre como una mosca ante un pastel de bodas(Manolo García) Duración: 4'54''
Crucé el puente de Manhatan
alegre como una mosca ante un pastel de bodas.
Caminé días lluviosos
bajo un cielo lluvioso en Jaén.
Y era un Don Nadie
en el papel de Don Nadie.
Personaje de mi obra
con mi libreta de dibujo bajo el brazo,
mirando embelesado
a las estudiantes de trenzas rojas.
Y tú me escribes sin conocerme.
Extraño se siente el ratón de serrín
ante el gato de trapo.
Que me dibujaras un paisaje,
que me cantaras sin palabras, te pediría.
En un cartel indicador, que me pintaras
tu nombre y una flecha que me guiara.
Ya no sé si es que mi pecho late
cual mecánico ingenio o está averiado.
O germina como un palosanto
en un paisaje dibujado.
Hasta la fecha nadie me ha tomado de la mano
para mostrarme el sabor
de lo perfectamente inútil.
Así, soy viajero, billete en mano hacia la Osa Mayor
(aunque me aprieta el traje de astronauta.)
Si quieres, compañero, compartiremos
la botella de oxigeno, que somos viajeros;
que somos vaqueros intentando galopar
hacia un brillante porvenir:
el que nos muestran las vallas publicitarias.
Crucé el puente de Triana
contento como un maestro el uno de mayo.
Caminé días de feria
bajo un cielo color andaluz
y era Don Alguien
en el papel de Don Alguien.
Tú me escribes sin conocerme.
Extraño se siente el ratón de serrín
ante el gato de trapo.
Que me dibujaras un paisaje.
Que me cantaras sin palabras, te pediría.
En un cartel indicador que me pintaras
tu nombre y una flecha que me guiara.
Ya no sé si es que mi pecho late
cual mecánico ingenio o está averiado.
O germina como un palo santo
en un paisaje dibujado.
Que no sé si es que mi pecho late
cual mecánico ingenio o está averiado.
Prendí la flor(Manolo García) Duración: 3'58''
Prendí la flor de lis en tu pelo.
Prendí la flor de lis sintiendo
que se me escapaba el tiempo
En tus besos serios, fieros,
prendí la flor y en mis dedos
sentí que todo marchita,
que todo se nos escapa.
Como los trigales lentos,
lentamente hacia el olvido.
Lentamente, sin remedio.
No pasa el tiempo desde que te marchaste.
No hay meses ni años en el calendario.
Soy como el árbol volcado
que no acaba de secarse.
Un tango arrabalero y dulce,
tan dulce como la melaza
quiero, mi vida, escribirte.
Quizá para recordarte
que el amor sólo es entrega
y que a veces, oro es
lo que junto a ti reluce
Prendí la flor de lis en tu pelo,
prendí la flor de lis sintiendo
que se me escapaba el tiempo.
Un tango pendenciero y triste
quisiera amor escribirte.
Como una noche de farra,
como un amanecer
en una cama extraña.
Tango de la lejanía,
del amor de un solo bando.
Lo que sentí junto a ti
jamás lo sentiré en otros brazos.
Prendí la flor de lis en tu pelo.
Prendí la flor de lis sintiendo
que se me escapaba el tiempo.
En los desiertos por habitar(Manolo García) Duración: 3'09''
En los balcones de un mar desierto,
en los desiertos por habitar
quiero dormido vivir despierto
en los desiertos por habitar.
Sobre el sol de tus tejados
quiero vivir, pueblo de sierras. Sobre arpilleras.
Como los gatos errantes de la pineda.
Seguir los pasos de los pastores hacia los altos;
sobre los riscos flotando olores de tiernos amores.
En los balcones de un mar desierto
en los desiertos por habitar
quiero dormido vivir despierto
en los desiertos por habitar.
Seguir los pasos de los arrieros
que son del viento.
Con sus perros sin dueño.
Cambiar de horizonte, cambiar creciendo,
en la turbulencia del viaje incierto,
del alegre río verde, fugaz
en la serena noche constelada.
De este viejo tren.
De este viejo tren sin destino ni horario
que no se ha de achicar del llano a la pendiente.
En los balcones de un mar desierto,
en los desiertos por habitar
quiero dormido vivir despierto
en los desiertos por habitar.
Alegre como una mosca ante un pastel de bodas (fragmento)(Manolo García) Duración: 0'38''
Instrumental
Un Plan(Manolo García) Duración: 5'08''
Hoy, hoy tengo un plan. Hoy, hoy tengo un plan
Hoy tengo un plan para empezar a vivir,
me digo de nuevo mientras remoloneo.
Sólo cinco minutos, sólo cinco más entre las sábanas.
Hoy tengo un plan, perfecto plan diría yo,
para empezar a asfaltar centímetro a centímetro planetas.
A medias sólo, que las otras mitades
estarán reservadas para los enamorados o para las inmobiliarias.
Hace buen día, es temprano.
Buena ocasión para madrugar y mirar si se tiene a mano
el artilugio de achicar problemas.
Cortina de humo que distraiga de ese gris de la rutina.
Del lastre de la rutina.
Hoy, hoy es un día aparente. Hoy, hoy tengo un plan.
No quiero remolonear entre las sábanas.
Que hoy tengo un plan, perfecto plan diría yo,
para empezar a triunfar.
Voy a ir al restaurante chino de Manolito Chen.
Camino de almorzarnos el domingo.
Hoy podemos ir al cine mudo de los hermanos Marx.
Hoy quiero irme de mi, sentirme solitario.
Que me lleven al zoo y le digan a Copito de Nieve:
"Mira, te presento. Este es el famoso monstruo de las galletas".
Hoy, hoy tengo un plan. Hoy, hoy tengo un plan.
Hoy es un día más que seremos o miraremos
títeres televisivos y que haremos una cínica lista
o estaremos en la cínica lista de los listos.
Mientras suenan las campanas de la catedral (ding dong).
Llamando a las confusas filas para la insurrección.
Hoy, hoy es un dia aparente. Hoy, hoy tengo un plan.
Hoy tengo un plan.
No pienso remolonear entre las sábanas.
Que tengo un plan, perfecto plan diría yo,
para empezar a triunfar.
Hoy es el dia perfecto para hacer carambola,
rizar el rizo o hacer novillos
para ilustrarnos en la enciclopedia de los mas ilustrados.
O mandar a la... a los que nos taladran: ¡compre! ¡compre!
¿Qué pasa si no quiero comprar, sólo cambiar?
¡cambio! ¡cambio!: una bola de cristal por un hueso,
un botijillo de barro pintado por un beso,
en la boca del lobo un clavel por un ramillete de ocas.
Un tapete por un dado (Pollo-pera para la galli-pava).
Hoy, hoy tengo un plan. Hoy, hoy tengo un plan.
Un pedal por un dedal
o por un vado por el que poder cruzar al otro lado.
El silencio de alguien que no quiere hablar,
por un halo de misterio.
El mejor trato por nada, al que no quiere comprar.
¡Al que no quiere comprar déjenle en paz!
Hoy, hoy tengo un plan. Hoy, hoy tengo un plan.
Hoy, hoy tengo un plan.
jueves, 17 de mayo de 2007
MANOLO GARCÍA "Arena en los bolsillos"
Marzo 1998 Duración: 60'59''© BMG Ariola
1. Prefiero el trapecio (4:58) 2. Carbón y ramas secas (4:45) 3. Del Bosque de tu Alegría (4:32) 4. Pájaros de Barro (4:08) 5. Sobre el oscuro abismo en que te meces (4:30) 6. A quien tanto he querido (3:46) 7. Como quien da un refresco(4:40) 8. Zapatero(4:58) 9. A San Fernando, un ratito a pie y otro caminando (3:49) 10. La llanura (3:27) 11. Viernes(3:39) 12. La sombra de una palmera(4:11) 13. Carbón y ramas secas (5:32) 14. Pájaros de barro (Instrumental) (4:04)
Prefiero el Trapecio(Manolo García) Duración: 4'58''
Con las hermanas Gilda duermo en una cama grande.
Bailamos con las canciones del Sisa y el Peret.
En un edificio con ventanas sin cristales,
Carpanta y yo vivimos a base de latas de calamares.
En el trece, rue del Percebe,
vivo en la ausencia del deseo canalla.
En la indigencia del garfio y la pata de palo.
Y si la vida es un sueño,
como dijo algún navegante atribulado,
prefiero el trapecio
para verlas venir en movimiento.
Voy viviendo a mi manera.
Si conviene regando. Pa' que crezca la higuera.
Pa' que crezca y de sombra,
pa' que dé sombra y frutos
y muchas primaveras,
y muchas primaveras.
Ante una hoguera que alimento
con muebles de algún desalojo indecente,
me caliento junto al Correcaminos,
Rompetechos y otros colegas.
En fin, buena gente.
Somos gente ficticia.
Náufragos urbanos.
Perdidos, renegados, inadaptados,
olvidados. Gente ficticia,
gente fetén si el mundo fuese de cartulina.
Prefiero el trapecio
para verlas venir en movimiento.
Voy viviendo a mi manera,
si conviene regando. Pa' que crezca la higuera.
Pa' que crezca y de sombra,
pa 'que de sombra y frutos
y muchas primaveras,
y muchas primaveras.
Caballeros de bombín gastado.
Calcetín a rombos.
De guante roto.
De bufanda mugrienta en las húmedas noches de marzo.
Como el lindo gatito fracasamos invariablemente
para diversión del personal
que nos mira de reojo.
Y como el Coyote, nunca llegamos a la hora,
ni al lugar, ni en el momento preciso.
[
Carbón y ramas secas(Manolo García) Duración: 4'45''
Sírvete entretanto
lo que te apetezca.
Redimirte quiero
mas sin sobresaltos.
Sobre los tejados se escapa la tarde.
Humo de un cigarro que fuma Gardel.
En el dulce licor que me hiere salvaje,
en los garabatos que hago en el mantel.
Y esperaré. Y si no vuelves,
bajo el olivo me quedaré dormido.
Esperaré por si te pierdes.
Saldrá la luna, fanalico encendido.
Te regalo mi capa,
mi capa de color grana.
Mi triste sonrisa
alzada en las ramas,
en los gallardetes,
en las banderolas.
Yo te haré un vestido
de un rojo amapola.
Nana del marinero,
nudo de antojos,
que nadie te amará tanto como yo.
Si ahora pudiese estar mirando tus ojos
iba a estar escribiendo aquí esta canción.
Esperaré. Y si no vuelves,
bajo el olivo me quedaré dormido
y dormiré entre libros prohibidos.
Al olvido de un tiempo que añoro.
El que viví contigo.
Mi caballo negro yo te lo regalo.
Carbón, ramas secas al enamorado.
Perdonarte quiero
más no tengo prisa.
Disculpa un momento,
que me desenredo.
Sírvete entretanto
lo que te apetezca
Redimirme quiero
mas sin sobresaltos.
Tuyo es el triunfo, sabor amargo
del seco fruto del desencanto.
Laurel del triunfo, sabor amargo
del seco fruto del desencanto.
Del Bosque de tu Alegría(Manolo García) Duración: 4'32''
Porque de ti volví a aprender el nombre de las cosas.
Porque de ti volví a aprender lo necesario.
Pan, casa, destino, camino.
De ti volví a aprender. Del bosque
de tu alegría. De manos
de tu sereno misterio.
Quedaba mucho por hacer:
arreglar la huerta,
hablar con los perros,
pasear por las orillas del otoño.
Quedaba mucho por hacer.
Quedaba mucho.
Porque de ti volví a aprender lo necesario.
A prescindir de lo inútil,
que nada es precario.
Del brillo de tus ojos
a disfrutar el tiempo lento.
Y cuatro cosas útiles de tu gesto cierto.
Y muchas cosas más de ti aprendí.
Y quedaba mucho por hacer.
A tirar el lastre, de eso que es la existencia.
Del tráfico, del peso de los lunes.
Gris, cielo, hoguera, camino.
De películas malas.
A robarle el tiempo al minutero,
que los relojes matan el tiempo.
Quedaba mucho por hacer:
recoger los sueños en las noches frías
como cuando no hay peces recojo las redes vacías.
Quedaba mucho por hacer.
Quedaba mucho.
Aprendí a sumar lo lógico y lo incierto.
A poner la mesa.
Aprendí a tolerar la presencia necesaria
de las arañas.
Aprendí a soportar sólo lo soportable.
Y quedaba mucho por hacer,
rechazar el tedio, luchar contra él.
Y quedaba mucho por hacer.
Limpiar de malas hierbas el prado,
arrancar las rejas y cercados.
Hacer montones: perros con gatos.
Hacer montones: soles y estrellas.
Borrar las señales de vuelo
para que los pájaros sean dueños del cielo.
Y quedaba mucho por hacer...
Y quedaba mucho por hacer...
Y quedaba mucho por hacer...
Y quedaba mucho por hacer...
[
Pájaros de Barro (Manolo García) Duración: 4'08''
Por si el tiempo me arrastra
a playas desiertas,
hoy cierro yo el libro
de las horas muertas.
Hago pájaros de barro.
Hago pájaros de barro y los hecho a volar.
Por si el tiempo me arrastra
a playas desiertas,
hoy rechazo la bajeza
del abandono y la pena.
Ni una página en blanco más.
Siento el asombro de un transeúnte solitario.
En los mapas me pierdo.
Por sus hojas navego.
Ahora sopla el viento,
cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
Ya no subo la cuesta
que me lleva a tu casa.
Ya no duerme mi perro junto a tu candela.
En los vértices del tiempo anidan los sentimientos.
Hoy son pájaros de barro que quieren volar.
En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.
Ahora sopla el viento.
Cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
Cuando no tengo barca, remos ni guitarra.
Cuando ya no canta el ruiseñor de la mañana.
Ahora sopla el viento.
Cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.
Sobre el Oscuro Abismo en que Te Meces (Manolo García) Duración: 4'30''
En los talles de las mujeres te complaces.
En cuadros antiguos y en herrumbrosas llaves.
En el pasar sereno del cometa.
En el cajón secreto de tu armario.
En la luz brillante de las olas.
En el oscuro abismo en que te meces.
De palabras viejas y antiguos verbos,
como el vino viejo que bebes,
es tu aroma seco de una vida larga.
Sobre el oscuro abismo en que te meces.
Sobre el oscuro abismo en que me mezco.
Sobre el oscuro abismo en que te meces.
Sobre el oscuro abismo en que me mezco.
Junto a las acacias de la orilla
de flores te disfrazas.
Y como si todo fuese cierto
te miras en el miedo.
Florecen las malvalocas
en la selva de tu pelo,
mientras te bebes los días
como azúcar caramelo.
Al refresco de lima,
al refresco salvaje
que la vida se enreda
como bolo de encaje.
Florecen las primaveras
de risas y de aguaceros,
como florecen los campos
de la tierra que más quiero.
A tu lado mi vida
va pasando discreta
entre los naranjos
que yo tengo en mi vega.
En los talles de las mujeres te complaces.
En los cuadros antiguos y en las herrumbrosas llaves.
En el pasar sereno del cometa.
En el cajón secreto de tu armario.
De palabras viejas y antiguos verbos,
como ese vino viejo que bebes,
es tu aroma seco de una vida larga.
Es tu aroma en la vibrante luz de las olas.
Sobre el oscuro abismo en que te meces.
Sobre el oscuro abismo en que me mezco...
A Quien tanto He Querido(Manolo García) Duración: 3'46''
No quiero tu amor.
Ni escuchar tu voz, ni vivir por ti.
No quiero tu amor.
Porque cuanto más te alejas más libre me siento.
De ti ya nada espero
que el camino acaba aquí.
Ya no soy
ni canción ni sueño.
Ya no estás.
Ya no siento el zarpazo de tu silencio.
Hoy es como si todo hubiese pasado hace tiempo.
Te llevas el capote bolero de mis pasiones.
Ni me interesa, ni lo lamento.
Hoy quiero tu amor.
Y escuchar tu voz y vivir por ti.
Hoy quiero tu amor.
porque cuando más te alejas más triste me siento.
De ti ya nada espero
que el camino acaba aquí.
Ya no soy ni fin ni destino.
Ahora sé que acabó lo que compartimos.
Ya olvidé tu voz, tu piel,
aunque llore por ti alguna vez.
Mi corazón libre es pero siente la pena.
De caricias aéreas enmarañé tu cuerpo.
A quien tanto he querido le escribo.
Ya no peino tu pelo,
son los dedos del viento.
[
Como Quien da un Refresco (Manolo García) Duración: 4'40''
Me detengo en las miradas,
me escapo detrás.
Son como bandadas de grises palomas.
Azules, rojas, de todos los colores.
Sólo busco refrescar estos calores.
Me detengo en las miradas.
Con los ojos que me miran
me puedo escapar.
Sólo busco fijar esos vivos momentos.
Miradas limpias o pálidas miradas.
Sólo busco alegrarme la mañana.
Te confieso que no atino
a encontrar la calma.
Nada ansío más
y es lo que menos tengo.
Se va el alma silenciosa por la ventana
detrás de algunos ojos azul sediento.
¡Ay! del que se enamora hasta en un desierto.
Dame descanso como quien da un refresco.
Tu mirada vuela. Vuela, calma, vuela.
En las calles es una flecha que alivia el tiempo de los poetas.
Tu mirada vuela. Vuela, calma, vuela.
En las calles es una flecha que alivia el tiempo de los poetas.
Me detengo en las miradas.
Me escapo detrás.
Busco en ese mar de miradas perdidas.
Azules, verdes, de todos los colores.
Son tan libres como libres son los hombres.
Me detengo en las miradas.
Que el amanecer me encuentra siempre despierto.
Que me desvela el hambre que de ti tengo.
Se va el alma silenciosa por la ventana.
Se va detrás del lucero de la mañana.
Dame descanso como quien da un cigarro.
Tu mirada vuela. Vuela, negra, vuela.
En las calles es una flecha que alivia el tiempo de los poetas.
Tu mirada vuela. Vuela, negra, vuela.
Es la flecha que hiere el tiempo.
Que lo detiene, que lo hace espeso.
Que lo detiene, que lo hace eterno.
Tu mirada.
Tu mirada.
Tu miradaaaa...
Zapatero (Manolo García) Duración: 4'58''
Penacho de plumas, penacho de espuma
como de cerveza,
como rubia trenza que no cesa.
De subir, de subir a lo alto
hasta la azotea a mirar el cielo.
Donde vives ahora,
en una casa baja;
donde pasas las noches
en tu cama de escarcha.
Mándame en un sobre
tu sonrisa rota.
Rápido García.
Yo te la compongo.
Se reparan botas,
bolsos de cuero y alpargatas,
canastos de mimbre, diademas de borlas.
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más
mientras nuestras bocas se quieran besar.
Con nieve de nardo
yo te la remiendo.
Con tela del aspa
de un molino viejo.
Con polvo del brillo
de un trozo de espejo.
Con el rabo blanco
de un gato perplejo.
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestras bocas se quieran besar.
Mándame en un sobre
tu sonrisa rota.
Yo te la compongo
que soy zapatero.
Que soy zapatero,
que soy zapatero remendón...
Que soy zapatero,
que soy zapatero remendón...
Que soy zapatero,
que soy zapatero remendón.
]
A San Fernando, Un Ratito a Pie y Otro Caminando(Manolo García) Duración: 3'49''
Pártete conmigo un cuartito de silencio.
Préstame esta noche tu maleta de los sueños.
O me echas un pulso, o jugamos un sencillo.
Frótate conmigo hasta que me saques brillo.
Llévame esta noche a San Fernando,
iremos un ratito a pie y otro caminando.
Súbeme al monte de las siete verdades
o enséñame a besar como tú sólo sabes.
Llévame esta noche a San Fernando,
iremos un ratito a pie y otro caminando.
Que si me paro el muermo me puede.
Y si me puede me meto en la cama
que es donde mejor se está cuando llueve.
Que ya no me paro ni un momento
antes de que se nos lleve el viento.
Llévame a ese cine,
al de las sábanas blancas.
O córtame el pelo.
O vamos a robar naranjas.
En cuanto amanezca
nos subimos a la parra
pa' hacer el amor
sobre el lucero del alba.
Llévame esta noche a San Fernando,
iremos un ratito a pie y otro caminando.
Súbeme al monte de las siete verdades
o bésame. O bésame como tu sabes,
como tan sólo tú sabes.
Como tan sólo, tan sólo tú sabes.
Enséñame las fotos que tienes en tu caja de galletas.
Enséñame a hacer como tú haces la veleta.
La Llanura (Manolo García) Duración: 3'27''
Aquí me tienes.
A ratos encendido, a veces feliz.
Aquí te espero.
A ratos generoso, a veces audaz.
Al plomo de la realidad.
Mendigo de amor hoy seré.
Te espero junto a la farola.
Palmeo por rumbas a James Brown.
Si puedes mejor ven sola.
Si me quieres pérfido soy santo.
Si angelical me quieres,
la rama podrida del árbol.
Volveré.
Volveré cuando el gallo no coma.
Volveré.
Volveré cuando el gallo no quiera comer.
Léeme a Polibio en el andén
y así esperamos que llegue tu tren
que tanto tarda.
Mejor leemos a Platón.
No calla. Léeme el Lecturas
que tanto nos gusta.
Un paralítico tren va silbando
sobre la vía trazada con tiralíneas.
Al Basiti, la llanura.
Un mundo plano como punta del alfiler.
El viento vuela tu falda.
Nos salva el altavoz del andén.
Y ahora gírate y anda
hacia el tren que nos separará.
Se aleja tu mirada detrás de la ventana.
Volveré.
Volveré cuando el gallo no coma.
Volveré.
Volveré cuando el gallo no quiera comer.
Llegaré con un saco cargado de agujas.
Llegaré caminando sobre un alfiler.
Viernes (Manolo García) Duración: 3'39''
Como cada viernes
salgo a dar una vuelta.
A quemar la semana.
Y caminar a la deriva. Caminar.
Siéntate.
Siéntate, ven, cuéntame.
Siéntate. Cuéntame.
Ven, siéntate. ¿De dónde sales tú?
Salgo. Vuelve a ser viernes.
Salgo a respirar aire y callejear.
Y caminar a la deriva; andar y andar.
Siéntate.
Siéntate, ven, cuéntame.
Siéntate.
Ven, siéntate, cuéntame, ¿de dónde sales tú?
Usa mis manos, mi nombre, mi ropa, mi ordenador.
Háblame toda la noche si me quieres convencer.
Un rato, una hora, un día. Un tiempo sin determinar.
Tarda una vida en contarme lo que me quieras contar.
¡Ay! si tu quisieras...
Mi corazón es un tam-tam.
Una postal desde Idaho.
Un disco viejo.
Una moto disparada.
Un final de mes.
Un túnel sin tren.
Una granada.
Un corazón que se desgrana.
Es un avión sobre la Pampa.
Hola y adiós, hasta mañana.
Quemar semanas.
Dame alguna pista o dime ya te llamaré.
O llámame.
Tu nombre al menos, si vas a desaparecer.
Hoy es viernes
y los sueños brillan más.
Hoy es viernes y quiero bailar.
Sólo bailar.
[
La Sombra de una Palmera (Manolo García) Duración: 4'11''
El calor que tú me has dado
no volvió en ningún momento.
No encontré otro mirlo blanco.
No lo hay bajo el firmamento.
Del vuelo de tus palomas,
del ala de tu sombrero,
me columpié en el alero
de los aires que te dabas.
Abanicos por pestañas
que cada vez que me mirabas
se me doblaban las cañas
varitas de paragüero.
La sombra de una palmera
es alimento del alma.
Ahora que todo ha pasado;
neblina del sentimiento.
Añoranza de otro tiempo
en que me honraba tu presencia
que fue tu amistad sincera,
desinteresada y cierta.
De la sombra, de la sombra que yo amé.
De la sombra, de la sombra que se fue.
La sombra de tu palmera
me cobija, es un encuentro.
Con sus brazos me rodea,
me apacigua el sufrimiento.
Es un desierto de esperas,
de amaneceres ardientes,
de mañanas que florecen
como troncos de serpientes.
La sombra de una palmera
es alimento del alma,
es un desierto de arena.
Ahora que todo ha pasado,
neblina del sentimiento.
De la sombra, de la sombra que yo amé.
De la sombra, de la sombra que se fue.
Carbón y Ramas Secas (v. 2)(Manolo García) Duración: 5'32''
Sobre los tejados se duerme la tarde.
Humo de un cigarro que fuma Gardel.
En el dulce licor que me hiere salvaje,
en los garabatos que hago en el mantel.
Y esperaré. Y si no vuelves,
bajo el olivo me quedaré dormido.
Y esperaré por si te pierdes.
Será mi luna, tu fanal encendido.
Te regalo mi capa,
mi capa de color grana.
Mi triste sonrisa
alzada en las ramas,
en los gallardetes,
en las banderolas.
Y te hago un vestido de un rojo amapola.
Nana del marinero,
nudo de antojos,
que nadie te querrá tanto como yo.
Si ahora pudiese estar mirando tus ojos
iba a estar escribiendo aquí esta canción.
Esperaré. Y si no vuelves,
bajo el olivo me quedaré dormido
y viviré otras vidas prohibidas.
Al olvido del tiempo que añoro.
El que viví contigo.
Mi caballo tordo yo te lo regalo.
Carbón, ramas secas. Soy enamorado.
Perdonarte quiero
más no tengo prisa.
Disculpa un momento,
que me desenredo.
Sírvete entretanto
lo que te apetezca
Redimirte quiero
mas sin sobresaltos.
Destila el triunfo, sabor amargo.
Del seco fruto del desencanto.
Laurel del triunfo, sabor amargo
del seco fruto del desencanto.
[
Marzo 1998 Duración: 60'59''© BMG Ariola
1. Prefiero el trapecio (4:58) 2. Carbón y ramas secas (4:45) 3. Del Bosque de tu Alegría (4:32) 4. Pájaros de Barro (4:08) 5. Sobre el oscuro abismo en que te meces (4:30) 6. A quien tanto he querido (3:46) 7. Como quien da un refresco(4:40) 8. Zapatero(4:58) 9. A San Fernando, un ratito a pie y otro caminando (3:49) 10. La llanura (3:27) 11. Viernes(3:39) 12. La sombra de una palmera(4:11) 13. Carbón y ramas secas (5:32) 14. Pájaros de barro (Instrumental) (4:04)
Prefiero el Trapecio(Manolo García) Duración: 4'58''
Con las hermanas Gilda duermo en una cama grande.
Bailamos con las canciones del Sisa y el Peret.
En un edificio con ventanas sin cristales,
Carpanta y yo vivimos a base de latas de calamares.
En el trece, rue del Percebe,
vivo en la ausencia del deseo canalla.
En la indigencia del garfio y la pata de palo.
Y si la vida es un sueño,
como dijo algún navegante atribulado,
prefiero el trapecio
para verlas venir en movimiento.
Voy viviendo a mi manera.
Si conviene regando. Pa' que crezca la higuera.
Pa' que crezca y de sombra,
pa' que dé sombra y frutos
y muchas primaveras,
y muchas primaveras.
Ante una hoguera que alimento
con muebles de algún desalojo indecente,
me caliento junto al Correcaminos,
Rompetechos y otros colegas.
En fin, buena gente.
Somos gente ficticia.
Náufragos urbanos.
Perdidos, renegados, inadaptados,
olvidados. Gente ficticia,
gente fetén si el mundo fuese de cartulina.
Prefiero el trapecio
para verlas venir en movimiento.
Voy viviendo a mi manera,
si conviene regando. Pa' que crezca la higuera.
Pa' que crezca y de sombra,
pa 'que de sombra y frutos
y muchas primaveras,
y muchas primaveras.
Caballeros de bombín gastado.
Calcetín a rombos.
De guante roto.
De bufanda mugrienta en las húmedas noches de marzo.
Como el lindo gatito fracasamos invariablemente
para diversión del personal
que nos mira de reojo.
Y como el Coyote, nunca llegamos a la hora,
ni al lugar, ni en el momento preciso.
[
Carbón y ramas secas(Manolo García) Duración: 4'45''
Sírvete entretanto
lo que te apetezca.
Redimirte quiero
mas sin sobresaltos.
Sobre los tejados se escapa la tarde.
Humo de un cigarro que fuma Gardel.
En el dulce licor que me hiere salvaje,
en los garabatos que hago en el mantel.
Y esperaré. Y si no vuelves,
bajo el olivo me quedaré dormido.
Esperaré por si te pierdes.
Saldrá la luna, fanalico encendido.
Te regalo mi capa,
mi capa de color grana.
Mi triste sonrisa
alzada en las ramas,
en los gallardetes,
en las banderolas.
Yo te haré un vestido
de un rojo amapola.
Nana del marinero,
nudo de antojos,
que nadie te amará tanto como yo.
Si ahora pudiese estar mirando tus ojos
iba a estar escribiendo aquí esta canción.
Esperaré. Y si no vuelves,
bajo el olivo me quedaré dormido
y dormiré entre libros prohibidos.
Al olvido de un tiempo que añoro.
El que viví contigo.
Mi caballo negro yo te lo regalo.
Carbón, ramas secas al enamorado.
Perdonarte quiero
más no tengo prisa.
Disculpa un momento,
que me desenredo.
Sírvete entretanto
lo que te apetezca
Redimirme quiero
mas sin sobresaltos.
Tuyo es el triunfo, sabor amargo
del seco fruto del desencanto.
Laurel del triunfo, sabor amargo
del seco fruto del desencanto.
Del Bosque de tu Alegría(Manolo García) Duración: 4'32''
Porque de ti volví a aprender el nombre de las cosas.
Porque de ti volví a aprender lo necesario.
Pan, casa, destino, camino.
De ti volví a aprender. Del bosque
de tu alegría. De manos
de tu sereno misterio.
Quedaba mucho por hacer:
arreglar la huerta,
hablar con los perros,
pasear por las orillas del otoño.
Quedaba mucho por hacer.
Quedaba mucho.
Porque de ti volví a aprender lo necesario.
A prescindir de lo inútil,
que nada es precario.
Del brillo de tus ojos
a disfrutar el tiempo lento.
Y cuatro cosas útiles de tu gesto cierto.
Y muchas cosas más de ti aprendí.
Y quedaba mucho por hacer.
A tirar el lastre, de eso que es la existencia.
Del tráfico, del peso de los lunes.
Gris, cielo, hoguera, camino.
De películas malas.
A robarle el tiempo al minutero,
que los relojes matan el tiempo.
Quedaba mucho por hacer:
recoger los sueños en las noches frías
como cuando no hay peces recojo las redes vacías.
Quedaba mucho por hacer.
Quedaba mucho.
Aprendí a sumar lo lógico y lo incierto.
A poner la mesa.
Aprendí a tolerar la presencia necesaria
de las arañas.
Aprendí a soportar sólo lo soportable.
Y quedaba mucho por hacer,
rechazar el tedio, luchar contra él.
Y quedaba mucho por hacer.
Limpiar de malas hierbas el prado,
arrancar las rejas y cercados.
Hacer montones: perros con gatos.
Hacer montones: soles y estrellas.
Borrar las señales de vuelo
para que los pájaros sean dueños del cielo.
Y quedaba mucho por hacer...
Y quedaba mucho por hacer...
Y quedaba mucho por hacer...
Y quedaba mucho por hacer...
[
Pájaros de Barro (Manolo García) Duración: 4'08''
Por si el tiempo me arrastra
a playas desiertas,
hoy cierro yo el libro
de las horas muertas.
Hago pájaros de barro.
Hago pájaros de barro y los hecho a volar.
Por si el tiempo me arrastra
a playas desiertas,
hoy rechazo la bajeza
del abandono y la pena.
Ni una página en blanco más.
Siento el asombro de un transeúnte solitario.
En los mapas me pierdo.
Por sus hojas navego.
Ahora sopla el viento,
cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
Ya no subo la cuesta
que me lleva a tu casa.
Ya no duerme mi perro junto a tu candela.
En los vértices del tiempo anidan los sentimientos.
Hoy son pájaros de barro que quieren volar.
En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.
Ahora sopla el viento.
Cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
Cuando no tengo barca, remos ni guitarra.
Cuando ya no canta el ruiseñor de la mañana.
Ahora sopla el viento.
Cuando el mar quedó lejos hace tiempo.
En los valles me pierdo,
en las carreteras duermo.
Sobre el Oscuro Abismo en que Te Meces (Manolo García) Duración: 4'30''
En los talles de las mujeres te complaces.
En cuadros antiguos y en herrumbrosas llaves.
En el pasar sereno del cometa.
En el cajón secreto de tu armario.
En la luz brillante de las olas.
En el oscuro abismo en que te meces.
De palabras viejas y antiguos verbos,
como el vino viejo que bebes,
es tu aroma seco de una vida larga.
Sobre el oscuro abismo en que te meces.
Sobre el oscuro abismo en que me mezco.
Sobre el oscuro abismo en que te meces.
Sobre el oscuro abismo en que me mezco.
Junto a las acacias de la orilla
de flores te disfrazas.
Y como si todo fuese cierto
te miras en el miedo.
Florecen las malvalocas
en la selva de tu pelo,
mientras te bebes los días
como azúcar caramelo.
Al refresco de lima,
al refresco salvaje
que la vida se enreda
como bolo de encaje.
Florecen las primaveras
de risas y de aguaceros,
como florecen los campos
de la tierra que más quiero.
A tu lado mi vida
va pasando discreta
entre los naranjos
que yo tengo en mi vega.
En los talles de las mujeres te complaces.
En los cuadros antiguos y en las herrumbrosas llaves.
En el pasar sereno del cometa.
En el cajón secreto de tu armario.
De palabras viejas y antiguos verbos,
como ese vino viejo que bebes,
es tu aroma seco de una vida larga.
Es tu aroma en la vibrante luz de las olas.
Sobre el oscuro abismo en que te meces.
Sobre el oscuro abismo en que me mezco...
A Quien tanto He Querido(Manolo García) Duración: 3'46''
No quiero tu amor.
Ni escuchar tu voz, ni vivir por ti.
No quiero tu amor.
Porque cuanto más te alejas más libre me siento.
De ti ya nada espero
que el camino acaba aquí.
Ya no soy
ni canción ni sueño.
Ya no estás.
Ya no siento el zarpazo de tu silencio.
Hoy es como si todo hubiese pasado hace tiempo.
Te llevas el capote bolero de mis pasiones.
Ni me interesa, ni lo lamento.
Hoy quiero tu amor.
Y escuchar tu voz y vivir por ti.
Hoy quiero tu amor.
porque cuando más te alejas más triste me siento.
De ti ya nada espero
que el camino acaba aquí.
Ya no soy ni fin ni destino.
Ahora sé que acabó lo que compartimos.
Ya olvidé tu voz, tu piel,
aunque llore por ti alguna vez.
Mi corazón libre es pero siente la pena.
De caricias aéreas enmarañé tu cuerpo.
A quien tanto he querido le escribo.
Ya no peino tu pelo,
son los dedos del viento.
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Como Quien da un Refresco (Manolo García) Duración: 4'40''
Me detengo en las miradas,
me escapo detrás.
Son como bandadas de grises palomas.
Azules, rojas, de todos los colores.
Sólo busco refrescar estos calores.
Me detengo en las miradas.
Con los ojos que me miran
me puedo escapar.
Sólo busco fijar esos vivos momentos.
Miradas limpias o pálidas miradas.
Sólo busco alegrarme la mañana.
Te confieso que no atino
a encontrar la calma.
Nada ansío más
y es lo que menos tengo.
Se va el alma silenciosa por la ventana
detrás de algunos ojos azul sediento.
¡Ay! del que se enamora hasta en un desierto.
Dame descanso como quien da un refresco.
Tu mirada vuela. Vuela, calma, vuela.
En las calles es una flecha que alivia el tiempo de los poetas.
Tu mirada vuela. Vuela, calma, vuela.
En las calles es una flecha que alivia el tiempo de los poetas.
Me detengo en las miradas.
Me escapo detrás.
Busco en ese mar de miradas perdidas.
Azules, verdes, de todos los colores.
Son tan libres como libres son los hombres.
Me detengo en las miradas.
Que el amanecer me encuentra siempre despierto.
Que me desvela el hambre que de ti tengo.
Se va el alma silenciosa por la ventana.
Se va detrás del lucero de la mañana.
Dame descanso como quien da un cigarro.
Tu mirada vuela. Vuela, negra, vuela.
En las calles es una flecha que alivia el tiempo de los poetas.
Tu mirada vuela. Vuela, negra, vuela.
Es la flecha que hiere el tiempo.
Que lo detiene, que lo hace espeso.
Que lo detiene, que lo hace eterno.
Tu mirada.
Tu mirada.
Tu miradaaaa...
Zapatero (Manolo García) Duración: 4'58''
Penacho de plumas, penacho de espuma
como de cerveza,
como rubia trenza que no cesa.
De subir, de subir a lo alto
hasta la azotea a mirar el cielo.
Donde vives ahora,
en una casa baja;
donde pasas las noches
en tu cama de escarcha.
Mándame en un sobre
tu sonrisa rota.
Rápido García.
Yo te la compongo.
Se reparan botas,
bolsos de cuero y alpargatas,
canastos de mimbre, diademas de borlas.
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más
mientras nuestras bocas se quieran besar.
Con nieve de nardo
yo te la remiendo.
Con tela del aspa
de un molino viejo.
Con polvo del brillo
de un trozo de espejo.
Con el rabo blanco
de un gato perplejo.
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestros labios se quieran besar...
Que no hay nada más.
Que no hay nada más
mientras nuestras bocas se quieran besar.
Mándame en un sobre
tu sonrisa rota.
Yo te la compongo
que soy zapatero.
Que soy zapatero,
que soy zapatero remendón...
Que soy zapatero,
que soy zapatero remendón...
Que soy zapatero,
que soy zapatero remendón.
]
A San Fernando, Un Ratito a Pie y Otro Caminando(Manolo García) Duración: 3'49''
Pártete conmigo un cuartito de silencio.
Préstame esta noche tu maleta de los sueños.
O me echas un pulso, o jugamos un sencillo.
Frótate conmigo hasta que me saques brillo.
Llévame esta noche a San Fernando,
iremos un ratito a pie y otro caminando.
Súbeme al monte de las siete verdades
o enséñame a besar como tú sólo sabes.
Llévame esta noche a San Fernando,
iremos un ratito a pie y otro caminando.
Que si me paro el muermo me puede.
Y si me puede me meto en la cama
que es donde mejor se está cuando llueve.
Que ya no me paro ni un momento
antes de que se nos lleve el viento.
Llévame a ese cine,
al de las sábanas blancas.
O córtame el pelo.
O vamos a robar naranjas.
En cuanto amanezca
nos subimos a la parra
pa' hacer el amor
sobre el lucero del alba.
Llévame esta noche a San Fernando,
iremos un ratito a pie y otro caminando.
Súbeme al monte de las siete verdades
o bésame. O bésame como tu sabes,
como tan sólo tú sabes.
Como tan sólo, tan sólo tú sabes.
Enséñame las fotos que tienes en tu caja de galletas.
Enséñame a hacer como tú haces la veleta.
La Llanura (Manolo García) Duración: 3'27''
Aquí me tienes.
A ratos encendido, a veces feliz.
Aquí te espero.
A ratos generoso, a veces audaz.
Al plomo de la realidad.
Mendigo de amor hoy seré.
Te espero junto a la farola.
Palmeo por rumbas a James Brown.
Si puedes mejor ven sola.
Si me quieres pérfido soy santo.
Si angelical me quieres,
la rama podrida del árbol.
Volveré.
Volveré cuando el gallo no coma.
Volveré.
Volveré cuando el gallo no quiera comer.
Léeme a Polibio en el andén
y así esperamos que llegue tu tren
que tanto tarda.
Mejor leemos a Platón.
No calla. Léeme el Lecturas
que tanto nos gusta.
Un paralítico tren va silbando
sobre la vía trazada con tiralíneas.
Al Basiti, la llanura.
Un mundo plano como punta del alfiler.
El viento vuela tu falda.
Nos salva el altavoz del andén.
Y ahora gírate y anda
hacia el tren que nos separará.
Se aleja tu mirada detrás de la ventana.
Volveré.
Volveré cuando el gallo no coma.
Volveré.
Volveré cuando el gallo no quiera comer.
Llegaré con un saco cargado de agujas.
Llegaré caminando sobre un alfiler.
Viernes (Manolo García) Duración: 3'39''
Como cada viernes
salgo a dar una vuelta.
A quemar la semana.
Y caminar a la deriva. Caminar.
Siéntate.
Siéntate, ven, cuéntame.
Siéntate. Cuéntame.
Ven, siéntate. ¿De dónde sales tú?
Salgo. Vuelve a ser viernes.
Salgo a respirar aire y callejear.
Y caminar a la deriva; andar y andar.
Siéntate.
Siéntate, ven, cuéntame.
Siéntate.
Ven, siéntate, cuéntame, ¿de dónde sales tú?
Usa mis manos, mi nombre, mi ropa, mi ordenador.
Háblame toda la noche si me quieres convencer.
Un rato, una hora, un día. Un tiempo sin determinar.
Tarda una vida en contarme lo que me quieras contar.
¡Ay! si tu quisieras...
Mi corazón es un tam-tam.
Una postal desde Idaho.
Un disco viejo.
Una moto disparada.
Un final de mes.
Un túnel sin tren.
Una granada.
Un corazón que se desgrana.
Es un avión sobre la Pampa.
Hola y adiós, hasta mañana.
Quemar semanas.
Dame alguna pista o dime ya te llamaré.
O llámame.
Tu nombre al menos, si vas a desaparecer.
Hoy es viernes
y los sueños brillan más.
Hoy es viernes y quiero bailar.
Sólo bailar.
[
La Sombra de una Palmera (Manolo García) Duración: 4'11''
El calor que tú me has dado
no volvió en ningún momento.
No encontré otro mirlo blanco.
No lo hay bajo el firmamento.
Del vuelo de tus palomas,
del ala de tu sombrero,
me columpié en el alero
de los aires que te dabas.
Abanicos por pestañas
que cada vez que me mirabas
se me doblaban las cañas
varitas de paragüero.
La sombra de una palmera
es alimento del alma.
Ahora que todo ha pasado;
neblina del sentimiento.
Añoranza de otro tiempo
en que me honraba tu presencia
que fue tu amistad sincera,
desinteresada y cierta.
De la sombra, de la sombra que yo amé.
De la sombra, de la sombra que se fue.
La sombra de tu palmera
me cobija, es un encuentro.
Con sus brazos me rodea,
me apacigua el sufrimiento.
Es un desierto de esperas,
de amaneceres ardientes,
de mañanas que florecen
como troncos de serpientes.
La sombra de una palmera
es alimento del alma,
es un desierto de arena.
Ahora que todo ha pasado,
neblina del sentimiento.
De la sombra, de la sombra que yo amé.
De la sombra, de la sombra que se fue.
Carbón y Ramas Secas (v. 2)(Manolo García) Duración: 5'32''
Sobre los tejados se duerme la tarde.
Humo de un cigarro que fuma Gardel.
En el dulce licor que me hiere salvaje,
en los garabatos que hago en el mantel.
Y esperaré. Y si no vuelves,
bajo el olivo me quedaré dormido.
Y esperaré por si te pierdes.
Será mi luna, tu fanal encendido.
Te regalo mi capa,
mi capa de color grana.
Mi triste sonrisa
alzada en las ramas,
en los gallardetes,
en las banderolas.
Y te hago un vestido de un rojo amapola.
Nana del marinero,
nudo de antojos,
que nadie te querrá tanto como yo.
Si ahora pudiese estar mirando tus ojos
iba a estar escribiendo aquí esta canción.
Esperaré. Y si no vuelves,
bajo el olivo me quedaré dormido
y viviré otras vidas prohibidas.
Al olvido del tiempo que añoro.
El que viví contigo.
Mi caballo tordo yo te lo regalo.
Carbón, ramas secas. Soy enamorado.
Perdonarte quiero
más no tengo prisa.
Disculpa un momento,
que me desenredo.
Sírvete entretanto
lo que te apetezca
Redimirte quiero
mas sin sobresaltos.
Destila el triunfo, sabor amargo.
Del seco fruto del desencanto.
Laurel del triunfo, sabor amargo
del seco fruto del desencanto.
[
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